BAUTISMO
El Santo Bautismo es la base de toda la vida cristiana, la puerta a la vida en el Espíritu y la puerta que da acceso a los otros sacramentos. A través del Bautismo, somos liberados del pecado y renacemos como hijos de Dios; nos convertimos en miembros de Cristo, somos incorporados a la Iglesia y partícipes de su misión: "El Bautismo es el sacramento de la regeneración a través del agua en la palabra" (CCC 1213).
Normas para el Bautismo
Los padres que deseen inscribir a su hijo para el Bautismo deben pasar por la oficina parroquial durante el horario laboral o llamar al (773) 588-2620.
Pedimos a los padres que traigan el certificado de nacimiento de su hijo al momento de inscribirse para el Bautismo. Por favor, tenga en cuenta que la Iglesia Católica solo permite que los propios padres (al menos uno de ellos) o el tutor legal soliciten el Bautismo de su hijo. (Can. 868.1.1)
Una vez que los niños tienen más de 7 años, ya no se consideran infantes por la Iglesia y reciben el Bautismo y los demás Sacramentos de manera diferente (Can. 97). Para estos niños, comuníquese directamente con la Oficina de Educación Religiosa.
La Iglesia Católica no cobra por la celebración de ningún sacramento. Dicho esto, se invita a los padres a hacer una donación para los gastos de la parroquia. La donación sugerida para los feligreses registrados que contribuyen regularmente a la parroquia es de $50. Para los no feligreses, la donación sugerida es de $100. Nunca se le negará el sacramento a nadie simplemente por falta de recursos financieros.
El sacramento del Bautismo se lleva a cabo en:
NUESTRA SEÑORA DE LA MERCED
• Tercer domingo del mes a las 3:00pm (Inglés)
• Primer y tercer sábado del mes a las 11:00am (Español)
• Segundo domingo del mes a las 2:30pm (Español)
SAN FRANCISCO JAVIER
• Primer domingo del mes durante la celebración de la Misa (9:30 AM en inglés y 11:30 AM en español)
Nota: Hay un máximo de dos niños cuando el bautismo se lleva a cabo durante la Misa.
"Porque todos los que habéis sido bautizados en Cristo, de Cristo os habéis revestido." - Gálatas 3:27
Padrinos
En la medida de lo posible, se debe asignar un padrino a la persona que va a ser bautizada, quien ayudará al adulto en la iniciación cristiana o, junto con los padres, presentará al infante para el bautismo. Un padrino también ayuda a la persona bautizada a llevar una vida cristiana acorde con el bautismo y a cumplir fielmente las obligaciones inherentes a él. (Can. 872)
Normas para los padrinos (Can. 873 y 874)
Debe haber un padrino masculino o un padrino femenino, o uno de cada sexo. No es necesario que sean una pareja casada.
Deben tener 16 años o más. El pastor puede conceder excepciones.
Deben ser católicos que hayan sido bautizados, hayan recibido la Primera Comunión y el Sacramento de la Confirmación, y vivan vidas de fe como miembros activos de la Iglesia Católica, de acuerdo con su rol como padrinos.
Si están casados, deben estar casados en la Iglesia Católica.
Los padres del niño que va a ser bautizado no pueden ser padrinos de su propio hijo.
Un cristiano no católico bautizado puede ser padrino, siempre que el otro padrino sea católico.